Investiga, que no es poco

Las pequeñas charcas, vitales para las aves terrestres

Hoy continuamos mostrando la importancia de los cuerpos de agua de pequeño tamaño de manos, una vez más, de José Manuel Zamora y David Sánchez-Fernández (Universidad de Murcia). En esta entrada, nos muestran cómo las charcas son fundamentales para el mantenimiento de muchas poblaciones de aves terrestres.

La importancia de las charcas para la fauna terrestre

En una entrada anterior traíamos a colación la importancia de las pequeñas charcas para la conservación de la biodiversidad y la provisión de importantes servicios ecosistémicos al ser humano. Hasta la fecha, los esfuerzos de investigación dirigidos a evaluar el potencial de los pequeños cuerpos de agua para mantener la biodiversidad se han basado casi exclusivamente en el componente acuático, obviando las funciones que pueden desarrollar estos sistemas para la fauna terrestre.

Y es que, parece lógico pensar que estos pequeños enclaves también pueden ser importantes para diversos grupos de animales terrestres, como aves y mamíferos, que requieren en mayor o menor medida de la ingesta de agua para la termorregulación. En regiones áridas o semiáridas, como el sureste de la península ibérica, la disponibilidad de recursos hídricos accesibles para la fauna silvestre es muy reducida, y los pequeños cuerpos de agua pueden constituir la única fuente de agua disponible en grandes extensiones de territorio.

De hecho, recientemente se ha puesto de manifiesto la influencia de los pequeños cuerpos de agua en la distribución de determinadas especies de aves terrestres (estudio 1), por lo que la acuciante desaparición de estos ecosistemas acuáticos (magnificada por el cambio climático) podría tener serias consecuencias en las comunidades de vertebrados de regiones áridas y semiáridas. 

Paisaje típicamente estepario de las Tierras Altas de Lorca (Región de Murcia) donde aún prevalecen algunos elementos paisajísticos (charcas ganaderas y antiguos cortijos en desuso) de importancia trascendental para la conservación de las aves asociadas a zonas agrícolas. Autor: José Manuel Zamora.

Investigando la importancia de las charcas en la conservación de la fauna terrestre del Sureste Ibérico

El estudio que os presentamos hoy, publicado por investigadores del Departamento de Zoología y Antropología Física de la Universidad de Murcia (España) y del Departamento de Ecología e Hidrología de la misma institución, destaca la contribución de los pequeños cuerpos de agua al mantenimiento de las comunidades de aves terrestres.

Este equipo de investigadores –entre los que se hayan los autores de la entrada- hemos realizado censos de aves asociadas a 39 pequeños cuerpos de agua distribuidos a lo largo de la Región de Murcia, cubriendo un gradiente ambiental desde el árido litoral hasta las comarcas interiores, más altas y húmedas.

Estos pequeños cuerpos de agua están representados por tres tipologías según su estructura: abrevaderos lineales (también conocidos como pilones), albercas tradicionales y charcas ganaderas; y que se corresponden con cuerpos de agua tradicionales utilizados para la ganadería extensiva o la agricultura de autoconsumo. Paralelamente, hemos realizado transectos a pie en los hábitats adyacentes a cada cuerpo de agua para inventariar la comunidad de aves reproductoras.

De esta manera, hemos calculado qué proporción de las especies de aves hacen uso de estos pequeños sistemas aislados, cuantificando así la importancia relativa de los pequeños cuerpos de agua para el mantenimiento de las comunidades de aves terrestres.

Los resultados de nuestra investigación confirman que los pequeños cuerpos de agua actúan como elementos paisajísticos clave para mantener comunidades de aves terrestres. En promedio, en torno a tres cuartas partes de las especies de aves que habitan un determinado paisaje en el área de estudio se benefician de la presencia de los pequeños cuerpos de agua.

Este beneficio incluye, desde la regulación de la temperatura corporal a través de la ingesta directa de agua y el baño para el mantenimiento del plumaje, hasta la captura de insectos emergentes o especies presa asociadas a estos sistemas, e incluso la obtención de material (principalmente barro) para la construcción del nido.

Utilización de diferentes tipos de pequeños cuerpos de agua por parte de aves terrestres. a) Varios ejemplares de tórtola europea (Streptopelia turtur); b) macho adulto de pardillo común (Linaria cannabina); c) grupo de chovas piquirrojas (Pyrrhocorax pyrrhocorax) bebiendo agua en diferentes abrevaderos de zonas montañosas de la Región de Murcia; d) grupo de gangas ortegas (Pterocles orientalis) abrevando en una charca ganadera. Autor: José Manuel Zamora.

Aunque los 3 tipos de pequeños cuerpos de agua resultan relevantes para mantener comunidades de aves terrestres, los abrevaderos son los hábitats utilizados por un mayor número de especies de aves. Mientras, las charcas ganaderas son los hábitats donde se observa una mayor abundancia de individuos, así como una mayor proporción de especies amenazadas. Entre estas especies amenazadas se encuentran la ganga ortega, el cernícalo primilla y la terrera marismeña, aves asociadas a ambientes esteparios que han sufrido un marcado declive en las últimas décadas.

En este sentido, remarcamos la urgencia de blindar la protección legal de las charcas ganaderas, dado que constituyen prácticamente los únicos sistemas acuáticos presentes en nuestras estepas -se pueden considerar oasis entre campos de cereal- cuyo papel ecológico no podría ser reemplazado por otros ambientes de origen artificial (por ejemplo, balsas de riego).

Un llamamiento a la conservación de los pequeños cuerpos de agua

El estudio recalca la necesidad de proteger los pequeños cuerpos de agua, junto con otros elementos paisajísticos clave como setos, bosquetes isla o muros de piedra tradicionales. Así, resulta fundamental que estos hábitats acuáticos sean adecuadamente considerados en los programas agroambientales para fomentar la biodiversidad, especialmente en la nueva reforma de la Política Agrícola Común (PAC).

El actual proceso de industrialización que está experimentando la agricultura y la ganadería ha propiciado una simplificación de los ecosistemas, llevando a la pérdida de elementos paisajísticos singulares y a la homogenización del paisaje. En este sentido, la aplicación de medidas de gestión encaminadas a potenciar dichos elementos singulares ayudaría a revertir el actual declive que experimentan multitud de especies asociadas a paisajes agrícolas tradicionales.

Dichas medidas deberían basarse en programas de rehabilitación y creación de cuerpos de agua, desarrollo de directrices de buenas prácticas dirigidas a pastores, agricultores y cazadores, establecimiento de un volumen de agua mínimo (similar al caudal ecológico establecido en cuerpos de agua corriente) para evitar la sobreexplotación de aquellos cuerpos de agua asociados a fuentes o manantiales, así como fomentar la diversidad de microambientes, como refugios de piedra, combinación de zonas vegetadas y no vegetadas u orillas suaves para facilitar el acceso de la fauna.

Autores: José Manuel Zamora, David Sánchez-Fernández.

Editores: Félix Picazo, Tano Gutiérrez-Cánovas y Dani Bruno.

Artículo original:

Zamora-Marín, J. M., A. Zamora-López, D. Sánchez-Fernández, J. F. Calvo, and F. J. Oliva-Paterna. 2022. Traditional small waterbodies as key landscape elements for farmland bird conservation in Mediterranean semiarid agroecosystems. Global Ecology and Conservation 37:e02183.