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El Mar Mediterráneo se está acidificando

En este último capítulo de la serie sobre biogeoquímica y cambio climático, Susana Flecha nos trae un artículo donde muestra cómo el aumento en la concentración de CO2 en la atmósfera está aumentando la acidez del Mar Mediterráneo. ¡¡Con vosotros, Susana Flecha!!

Susana es Investigadora Postdoctoral en el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA-CSIC).

El cambio climático es con toda probabilidad el reto más grande que debemos afrontar como sociedad a lo largo de este siglo XXI. Las elevadas emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera no solo potencian el incremento de la temperatura de la Tierra, sino que este CO2 además se desplaza a otros compartimentos del planeta. Concretamente, una gran parte del CO2 de origen humano liberado a la atmósfera es absorbido por los océanos, lo que provoca una serie de cambios químicos que desembocan en el fenómeno conocido como Acidificación Oceánica. Este proceso consiste en una disminución del pH del agua, que se vuelve más ácida y que podría dañar a los organismos marinos.

Una gran parte del CO2 emitido por actividades humanas es absorbido por los océanos, lo que provoca la acidificación oceánica

En este trabajo, Susana Flecha y colaboradores muestran la evolución de la acidificación en el Mar Mediterráneo. Para ello, han tenido en cuenta los resultados de casi 3 años de mediciones continuas de pH, que nos informa de la acidez del agua, en el Mar Mediterráneo en la estación GIFT, localizada en el estrecho de Gibraltar. Esta zona es un enclave de gran importancia para el correcto funcionamiento de todo el mar Mediterráneo y la salud de sus ecosistemas ya que constituye la única conexión entre el Mediterráneo y el océano Atlántico.

Boya oceanográfica para medir la acidez del Mar Mediterráneo en el estrecho de Gibralatar (Estación GIFT). Foto: Susana Flecha

Los datos hablan por sí solos: el Mediterráneo se vuelve más ácido año tras año con reducciones medias anuales de -0.0044 en el pH de sus aguas (aunque pequeña, en la escala en que se mide el pH, esta cifra informa sobre cambios relevantes). Por otro lado, los autores han obtenido datos de pH del flujo de salida del Mediterráneo hacia el Atlántico por el estrecho de Gibraltar, y los valores de pH de las principales masas de agua del Mediterráneo: el agua intermedia levantina, originaria de la cuenca mediterránea oriental, y el agua profunda del Mediterráneo occidental, formada en el golfo de León (norte de Cataluña y sur de Francia). Ambas masas de agua también mostraron una disminución del pH con el tiempo. Sin embargo, la acidificación fue más acusada en las aguas profundas del Mediterráneo occidental, lo que puede estar relacionado con su diferente naturaleza biogeoquímica y con los procesos que ocurren durante el tiempo de tránsito desde los sitios de formación de estas masas de agua cerca del Sur de Francia hasta su salida hacia el océano Atlántico por el estrecho de Gibraltar.

El Mediterráneo se vuelve más ácido año tras año con reducciones medias anuales de -0.0044 en el pH

De esta manera podemos ver cómo los procesos biogeoquímicos tienen lugar en el espacio y en el tiempo de manera bien distintas. En este caso concreto, podemos apreciar cómo las aguas en superficie y profundidad del mar Mediterráneo se están acidificando de manera distinta a causa de diferentes dinámicas biogeoquímicas, lo que supone una dificultad añadida en los estudios de biogeoquímica marina. Por lo tanto, en estos ecosistemas, además de tener en cuenta la biodiversidad y composición química de los mares, resulta de vital importancia considerar los procesos físicos que originan las corrientes marinas y los movimientos verticales del agua .

Flecha, S., Pérez, F. F., García-Lafuente, J., Sammartino, S., Ríos, A. F., & Huertas, I. E. (2015). Trends of pH decrease in the Mediterranean Sea through high frequency observational data: indication of ocean acidification in the basin. Scientific reports, 5: 16770 doi:10.1038/srep16770.